Hay que tener en cuenta que sólo una parte de esas cantidades, 18,5 kilos, pertenecían a la empresa Giovanni Gold Sac., proveedor nuestro desde mayo de 2013. Dicha cantidad estaba destinada a la exportación a Italpreziosi.
Italpreziosi llevó a cabo una minuciosa "due diligence" con respecto a ese proveedor, siguiendo los procedimientos empresariales habituales. Durante la relación comercial, no habían surgido irregularidades o anomalías. La mercancía, desde el principio de las relaciones comerciales, siempre había pasado la aduana en Lima y siempre venía acompañada por documentos regulares.
Las autoridades peruanas o las otras autoridades internacionales nunca nos han informado sobre investigaciones o procesos judiciales en contra de nosotros.
Además, el artículo se refiere a las relaciones entre Italpreziosi y la mina peruana Comarsa y a los eventos correspondientes, que se remontan a 2012, segundo los cuales nuestra empresa recibió en 2013 la medida de sobreseimiento de la Corte Suprema estadounidense, en el que nuestra empresa ha sido reconocida, dentro de pocos meses, "totalmente inocente siendo comprador de oro de buena fe."